domingo, 16 de mayo de 2021

El olvido que seremos

 Bello título para una película que ensalza la belleza humana, la bondad, los valores de un médico colombiano, Héctor Abad,  visto desde la cálida convivencia de un niño y un mayor distanciamiento de un joven, su hijo, como corresponde a toda alma juvenil inquieta e inconformista que busca su camino propio, alejándose del niño que ve en el padre un modelo a seguir e imitar.

En El olvido que seremos asistimos a las luchas de un padre de familia por lograr una sanidad universal y unas adecuadas condiciones higiénicas para toda la población de su país, llegando a enfrentarse con las autoridades políticas y académicas de su país. También a las relaciones familiares, a su espíritu tolerante y comprensivo hacia sus hijas y su hijo, único varón. Quizá un retrato demasiado dulce, de alguien sin grietas y oscuridades, hasta que una tragedia rompe el paisaje idílico.



La película, inspirada en la novela del hijo, nos sacude con el protagonista principal, por su constante apego a la rebeldía, por su capacidad de decir no a las injusticias, por su espíritu nunca acomodaticio, siempre altruista, por su consideración que ningún problema de otros nos debe ser ajeno, hasta arriesgar  su vida si es necesario.

En fin, para terminar, decir que estamos ante una gran película que celebra la vida, con sus alegrías y sus tristezas, pero por encima de todo la importancia de la bondad, un valor arrinconado en un rincón polvoriento, pero sin el cual la vida sería un infierno gélido. Y la solidaridad, que siempre trae luz a la noche.

No hay comentarios:

Publicar un comentario