TOROS,ÉTICA, POLITICA Y NACIONALISMO ESPAÑOL Y CATALÁN

En los últimos tiempos estamos asistiendo a un debate en Cataluña referente a la posibilidad de abolir las corridas de toros en esta Comunidad. Tengo que decir que la noticia por una parte me parece positiva, aunque por otra no soy entusiasta de las prohibiciones. Las Plataforma Prou! (Basta), ha conseguido reunir 180000 firmas para lograr la creación de una Iniciativa Legislativa Popular que consiga acabar con las corridas de toros. Se oponen frontalmente las fuerzas políticas de derechas, el centro derecha tradicional, el PP, y la populista y neofascista(recordemos la alianza con Libertas) , Ciutadans, que han presentado enmiendas a la totalidad. PSC y CIU, en mi opinión muy acertadamente, dan libertad de voto a sus diputados. ICV y ERC votarán por la eliminación de esta forma peculiar de "arte". Personalmente me habría gustado que se planteara un referéndum, donde partidarios y detractores expresaran su opinión y los electores decidieran tras reflexionar. El debate, es un debate ético. Entre quienes pensamos que matar tras hacer sufrir largamente a un animal, en un espacio público, con aplausos y alaridos de placer, es indigno de una especie animal, como la nuestra, que se considera superior, dotada de inteligencia, sentimientos y empatía. Y quienes piensan que es un arte, una forma de cultura, que gracias a este espectáculo subsisten los toros. Dicho esto declaro no ser animalista, es decir no estoy a favor de dar derechos a los animales, no milito en Los Verdes, y como carne. Pero creo que la evolución de la humanidad implica ascender en visión ética, respetar a semejantes, y también evitar la crueldad innecesaria hacia los animales.En este sentido, antes que prohibir, me gustaría que la evolución ética fuera haciendo desaparecer las corridas de toros, al irse incrementando las conciencias que vieran con desagrado el espectáculo. Cierto es que mucha gente puede decir con razón, que muchos seres vivos son usados en experimentos médicos y científicos, y que muchos de ellos fallecen de forma muy cruel. Que quizá animales de los que nos alimentamos mueren de forma cruel. Y es cierto, pero eso no me lleva a defender las corridas de toros, ni a dejar de pensar que pese a todo es un espectáculo cruel, un síntoma, pequeño, sí, si tenemos en cuenta la maldad ejercida entre la misma especie humana, de brutalidad. Pero el debate ético, de opiniones enfrentadas y respetables, se obscurece cuando entran en juego las siniestras mentalidades nacionalistas, ya catalanas, ya españolas. Los primeros quieren liquidar todo lo que identifican con España. Los segundos consideran que forma parte de la cultura española. Unos y otros usan argumentos falaces, chantajistas, reaccionarios . Un catalanista tiene pleno derecho a que le gusten los toros .Un ferviente españolista, puede ser contrario a las corridas, ¿porqué no?. Pero los nacionalismos, ya español, ya catalán, ya de la conchinchina, se basan en el culto a las raíces, a la tribu, a la "cultura", sea esta una costumbre atrasada o cruel. Son, por tanto, enemigos del individuo libre, del individuo que quiere reflexionar por su cuenta, de quién no quiere ser una planta atada a una endiosada cultura, tradición, himno, bandera...Pretender que todo español debe defender las corridas de toros , porque es nuestra cultura es, nunca mejor dicho, y con perdón hacia los animales, una animalada. Personalmente no me gustan ni las sevillanas, ni el flamenco, ni los toros, y, cada vez menos, el fútbol. Salvo, por supuesto, la siesta. ¡Eso si que es cultura, y de la buena!. Promocionemos, pues, un buen espectáculo, como es ver alguien querido, ladear la cabeza y echar un agradable y regenerador sueñecito.
Y luchemos contra todos los nacionalismo, rojigualdos, ikurriños...que sólo quieren amargarnos la vida y atarnos a su cárcel despótica. Las corridas de toros, debate ético. Apartemos los nacionalismos.